lunes, 4 de agosto de 2008

La hilacha educativa

En 2007 el historiador Alfredo Jocelyn-Holt emplazó públicamente al experto en educación José Joaquín Brunner a reconocer que los numerosos títulos y grados académicos que ostentaba eran falsos. Brunner quien, como cualquiera puede consultar en Wikipedia, fue Ministro Secretario General de Gobierno bajo el gobierno de Frei Ruiz-Tagle entre 1994 y 1998; presidente del Consejo Nacional de Televisión; presidente de la Comisión Nacional de Acreditación de Programas de Pregrado, vicepresidente del Consejo Superior de Educación; miembro del Consejo de Ciencias del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDECYT), entre otros numerosos cargos, debió reconocer que sólo contaba con la licencia de secundaria y un título técnico en administración universitaria obtenido en Inglaterra después de un curso de un par de meses.

La polémica que se levantó sobre el particular estuvo acotada, principalmente, a foros y a publicaciones electrónicas. Salvo un artículo en La Tercera, el asunto pasó sin pena ni gloria en el resto de los medios encargados de informar al país. Las consecuencias para el sr. Brunner fueron, -además de tener que modificar sus datos en su blog, donde nos señala sus logros, pero no sus estudios- el despido de la Universidad del Desarrollo y un contrato en la Diego Portales por cuanto, según el rector de esta casa de estudios, Carlos Peña González, para ser un académico o un investigador de peso la certificación académica que supone el cartón "No es un requisito imprescindible, menos en Chile, donde el campo disciplinario en Ciencias Sociales está en plena expansión."

En suma, en Chile la educación de quienes toman decisiones en el ámbito educativo -y en otros ámbitos también-, es un asunto de mínima importancia por cuanto, mientras tengan los contactos sociales, familiares y políticos adecuados, están eximidos de realizar los mismos esfuerzos que aquellos que nos veremos afectados directamente por sus decisiones. Y es sobre este absurdo sobre el que se levanta una de las áreas más sensibles del andamiaje social de nuestro país.

En mi concepto, uno de los principales problemas de la educación en Chile es que ha caído en manos de los expertos. Cada cierto tiempo los Frankensteins del Mineduc dan vida a criaturas monstruosas, hechas con pedazos de prácticas metodológicas y retazos de teorías cognitivas encontradas en sus peregrinajes por doctorados, diplomados y sitios de internet dedicados al negocio de la educación. De allí, los expertos extraen fragmentos de ideas, conceptos y procedimientos que montan en programas o políticas destinadas a "mejorar la calidad de la educación de nuestro país" y que terminan en los sonados fracasos de casi todas las encuestas y aplicaciones de estándares internacionales de calidad de esa educación que buscaban mejorar.

Uno de los últimos productos perpetrados en el Ministerio de Educación, fue el diseño de un programa llamado "Enfoque por Competencias". En términos generales la lógica desde la que se fundamenta es la siguiente: es un error entregar contenidos generales a un grupo de alumnos con distintas habilidades. Lo importante es desarrollar esas habilidades naturales, de acuerdo a un programa ad hoc. Entonces, el alumno aprende, en la medida de sus capacidades -lo que equivale a decir, en la medida de lo posible- y el éxito del plan se mide al examinar los logros alcanzados y las habilidades desarrolladas. Dicho así suena "de lolo", pero los fundamentos éticos (ya salió el monje loco) desde donde se estructura esta teoría merecen, en mi retrógrado concepto, algunos reparos.

El enfoque por competencias se hace cargo de las habilidades que los educandos han de desarrollar no en relación a un concepto abstracto como el de "formación científico-humanista", sino a uno bien claro y concreto como el del Trabajo. En otras palabras, ya no se trata de educar al Hombre sino al Trabajador, a la medida de las necesidades del Mercado. Por ejemplo, de qué sirve un ingeniero civil con una sólida formación en teoría matemática si lo que se necesita es que sepa parar un puente; entonces, se le entrega los fundamentos matemáticos básicos y, el resto, es entrenarlo -adiestrarlo- en la práctica del levantamiento puentísitico porque, en definitiva, eso es lo que se espera de él.

Esta especialización del conocimiento se ha concebido de espaldas a una visión integral y holística del individuo. La lógica parece ser: hoy es tan amplio el ámbito del saber, son tantos y tan variados sus avances que ya no se puede entregar al alumno una visión global como podían entregar proyectos educativos anteriores, cuando el saber estaba acotado. Entonces, antes de hablar del absoluto, enseñemos lo particular que es mucho más manejable y fácil de entender por el "mutantito en ciernes". Así, este sistema, que reconoce el cambio cognitivo de las nuevas generaciones -mucho más tontas que las anteriores o, si lo prefiere, con inteligencias diferentes-, se hace cargo del lema "Divide y triunfarás" de Maquiavelo, aplicado esta vez a la formación del hombre y a la entrega de conocimientos.

El punto es que hacer una síntesis del conocimiento que enfrente su actual fragmentación implica tomar decisiones y nadie está dispuesto a tomarlas. ¿Quién es hoy lo suficientemente sabio o inspirado como para proponer una Weltanschauung Chilensis? Nadie está dispuesto a construir nuestra propia visión del Hombre, de la Realidad, del Sentido de la Existencia, porque faltan pelotas intelectuales para hacerlo. Entonces, entregados a la medianía de los expertos, debemos aceptar que a las nuevas generaciones se las adiestre para ser operarios de la máquina, constructores de una máquina, pero no para pensar en el sentido del trabajo y menos en la "maquinización" del Hombre. Eso es "muy denso", eso es paja y con eso, no se gana plata. En consecuencia, porque los expertos ven la realidad con la perspectiva de ratones hemos de aceptar que diseñen un sistema educativo para ratones: "Palabra de experto... demos gracias al Señor".

¿Qué sabe de esto el ciudadano promedio? Nada. ¿Están estos temas en las agendas de los movimientos estudiantiles? No. ¿Son temas que discutan regularmente los académicos en las Universidades? No ¿Y por qué? Este... voy por mi pedazo de queso.-

3 comentarios:

Francisco Javier dijo...

Estimado:

comparto en pleno muchas de sus apoteosicas visiones de nuestro futuro; no obstante ello hay que radicalizar un poco más la cosa. El misterioso "enfoque por competencias" va muy de la mano con la especialización técnica; por tanto lo que se pretende con ello es que el estudiante tenga un proceso de instrucción direccionado y acotado a las necesidades del mercado bajo sus propios intereses.. y luego tengo un patron "direccionado" que pueda echarle mano cuando decida o pueda seguir sus estudios.
Si lo toma dentro del proceso de educación superior de pre y post grado, vemos que hacer un proceso similar tendria serias y graves consecuencias con nuestra economía (creceria cerca del 10% por año, el PIB crecería en un 7%, y cosas asi); ya que hoy nuestras universidades no se preocupan por el conocimiento productivo, sino más bien por el conocimiento "paja", dando un buen ejemplo "ciencias y filosofia marxista" o "Folcklore antiguo greco-romano" y asignaturas asi que no contemplan en esencia lo que busca el "hambriento" estudiante.

En resumidas cuentas, considero valiosa su aportación; más cuando es una práctica recurrente en nuestro país integrar "mentes pensantes" que ni siquiera han terminado sus estudios de pregrado; o bien las colocaciones políticas que dimensionan las proyecciones económicas del país en base a lo que consiguen ingresar en sus bolsillos. Pero debe ahondar más en los procesos que nuestro "inmaculado" MINEDUC y sus hordas de sabios hacen por nuestro futuro. (es cosa de ver como estamos no más).

JAJAJAJAJA

Muy buenas apreciaciones estimado.

Saludos,

Anónimo dijo...

Mi escuela, la célebre carrera de Sociología de la Universidad de Concepción, lamentablemente sufre de la enfermedad ubicada al otro extremo de la perspicaz crítica que haces. Tanto se han preocupado sus expertos de dotar a sus alumnos de las armas para crear una, digamos, "mente crítica", holística, etcétera, que han obviado absolutamente la noción de practicidad, la idea de sociología como disciplina, la del profesional como artesano, que han creado engendros pensantes sólo capaces de encontrar trabajo, bueno, reproduciendo aquella simbólica formación dentro de la academia. Pero bueno, estoy absolutamente der acuerdo con los que señalas sobre la especifiación, que por lo demás posee cierta semejanza con lo MArx llamaría alienación (y aunque él hacía referencia al trabajo manual, creo que el término es extrapolable al quehacer intelectual y profesional).

Difiero, sin embargo, de tu observación de Brunner, que si bien es correcta al señalar que la ciudadanía tiene derecho (y deber, aunque dicho no sin ironía) de exigir saber las calificaciones de quienes ocupan cargos públicos y formulan proyectos y programas que afectarán a la ciudadanía, no justifica el ninguneo que yace latente en dicha observación a sus capacidades. A pesar de sólo contar con los títulos y calificaciones que señalas, Brunner ha contribuido notablemente tanto a la sociología de la educación como al desarrollo y debate de la disciplina misma en Chile. Desconozco si has leído parte de su obra sobre educación o sociología en general, pero mi humilde opinión es que es un intelectual chileno notable o, al menos, no ningunearía sus ideas a priori. Sus pecados en la arena de las políticas públicas son, digamos, los pecados propios de la arena de las políticas públicas: impuestas desde arriba y desde afuera (exógeno-descendentes, diría un profesor mío) sin contemplación por la realidad en la cual aterrizarán, construidas para afectar las estadísticas a corto plazo pensando en subir en las encuestas de opinión, pérdida inestimable de recursos en la maraña burocrática, el infaltable cuoteo político y reclutamiento de los amigos en la ejecución del proyecto, y, como mencionabas en ese notable párrafo, la creación de frankensteins.

Como sea, gracias por la posibilidad de reflexionar, que tanta falta me hace luego de que, irónicamente, terminara mis ramos en la universidad.

Incolás dijo...

Suelo no comentar por estos medios, porque creo que tengo mas preguntas que respuestas normalmente.

Sin embargo al llegar al final de la entrada me topo con lo siguiente: "¿Están estos temas en las agendas de los movimientos estudiantiles? No." Y gran sorpresa me da! Pues me considero parte activa de lo que aqui se ha denominado movimiento estudiantil, que en lo personal creo se desarrolla durante todo el año, no es tan solo el paro para mayo, la toma de junio, ni la barricada para el 11, sin embargo me duele pensar que la voz de los estudiantes si se haya alzado desde el año pasado fuertemente, y desde hace ya tres con respecto a los llamados planes por competencia. Porque no hace falta mucha memoria para recordar lo que paso a principios del 2007: Una escuela de trabajo social de la UTEM, en paro aproximadamente 3 meses, porque querer que les cancelaran el plan por competencias de esta carrera, al alero de lo que seria el proyecto Altazor, de nuestro querido y tan simpatico ex Rector Miguel Avendaño, y no fue un simple berrinche de jovenes anarkistas, sino que luego de un profundo proceso para entender que es lo que querian hacer, se decidio alzar la voz para que una atrosidad como esta, terminara de llevarse acabo, y es que para un trabajador social, un plan por competencias es el infierno y la muerte neuronal vivida en persona!. Y luego el segundo semestre, no satisfechos con la experiencia, nuestro amado y extrañado Rector, vuelve a hacer de las suyas iniciando el plan por competencias en cartografia, resultado: 4 meses en paro, para lograr que los espectaculares dirigentes de esta universidad, entendieran que los cartografos no querian aprender a dibujar mapas, sino que querian tener una vision mas global, social y humana de lo que los emplazamientos fisicos pudieran entregar, potenciando levantamientos cartograficos en pos de una mejor calidad de vida del hombre! y no en funcion de lo que el computador encontraba dentro de los parametros tecnicos.

Aqui el gran problema de la eduacion Chilena, es el Chileno! ¿Por que? Porque aun no tenemos una identidad definida, de lo que somos, lo que deberiamos ser, y de lo que queremos ser. Claro que somos todos chilenos pal dieciocho diran algunos, pero igual la cueca es media chilena, media peruana, media boliviana, nuestra fiestas patrias se celebran para el aniversario de la primera junta nacional de gobierno, y que era eso? eramos medio españoles, medios chilenos, a cargo de criollos! pero si hasta la chicha es vino a medio fermentar! y la empanada no es ni pan, ni pizza. Y por que digo todo esto? Porque al no tener una identidad definida no sabemos que es lo queremos de nuestro pais, por ende no hay un plan pais, un sistema pais, ni un proyecto pais.

La educacion es la base para desarrollar este proyecto: si quieres un pais fabricante de sus propios productos y bienes, perfecto, enfoquemos la eduacion hacia la tecnologia, potenciemos una educacion media tecnica-profesional, y desarrollemos mas la industria; si quieres un pais que se sostenga en base a la economia de exportaciones, importaciones, y neoliberal, perfecto, entonces enfoquemos la educacion para que todo vaya acorde a lo que se necesite: ingenieros comerciales, ingenieros en comercio exterior, administradores de empresas, "emprendedores". No estoy diciendo que una sea mejor la otra postura, sino que simplemente se tiene que tomar una decision a nivel pais, de que es lo que queremos y entendemos como tal! para hechar a andar todo en funcion de tal objetivo.

Sin embargo nuestro circulo vicioso, provoca que tengamos profesionales mediocres, porque no tienen una formacion solida desde la educacion media para lograr ser buenos, y para rematar la mediocridad, se mira en menos al profesor, que es la estructura fundamental en la formacion de las bases del proyecto pais! lo que provoca que tengamos gente estudiando para ser los futuros pedagogos del futuro, que no les alcanzo para ser escritores y enseñaran castellano, que no les alcanzo para ser ingeniero y enseñaran matematicas y etc. nunca tendremos una mayoria de profesores con vocacion que deseen como primera opcion hacer clases en el colegio F-458alpha-7 Leonardo Soto. Entonces estos mismos profesores mediocres, que hubieran deseado ser astrologos o poetas, le enseñan desde el gran afecto que tienen por su materia a los jovenes, que adquieren la misma frustracion inconciente, caminando hacia un destino que se les obliga tomar, porque a pesar de que se es "alumno" durante 12 años de nuestras vidas, en diciembre de cuarto medio, solo sabemos que hay que entrar a la Chile o la Catolica, a Medicina, Arquitectura, Ingenieria o Leyes. Pero como claramente no todos pueden entrar, ahi estan las universidades privadas, grandes colosos deboradores del dinero ficticio de los creditos universitarios para "hacer realidad tus sueños", sueño que en la mayoria de las veces se ve cohartado por infinidad de motivos, haciendo que tengamos como resultado, a un hombre de 25 años, con 12 de colegio, de lo cual ya se le olvido hasta quien fue Balmaceda, 2 carreras universitarias no terminadas, un curriculum con muchos trabajos part-time y una gran ficha en DICOM... ha perdido un cuarto de su vida, pero claramente ama incondicionalmente la fonda pal dieciocho, porque el es Chileno!

Yo, soy un estudiante movilizado, y no soy comunista, ni anarkista, ni nada terminado en ista, como decia una cancion por ahi: no pertenezco a ni un ismo, sin embargo exijo mi proyecto pais! y asi como yo, habemos otros muchos que luchamos dia a dia para lograr que el alumno, se vuelva estudiante.


Podria seguir alargandome bastante, pero creo que un intercambio de ideas es la gracia, no un discurso de media hora de un joven estudiante de diseño. Ojala mis palabras no se lean con un tono de resentimiento, sino al contrario, de reflexion.

Saludos.


Nicolas Gutierrez.
Diseño Industrial, 3º año.